1/16/2008

Mas sobre divulgación, sus 10 funciones

FUNCIONES ATRIBUIDAS A LA DIFUSION CIENTIFICA
Las funciones más importantes atribuidas a la difusión de la ciencia son las siguientes:
1. Creación de una conciencia científica colectiva. Si los comunicadores hemos de esforzarnos en ofrecer una información cierta y sugestiva sobre ciencia y tecnología, también los científicos tienen la obligación moral de dedicar una parte de su trabajo y de su tiempo a relacionarse con el público a través de los medios de información o por las demás vías que hoy se agrupan para el nombre de Comunicación Científica Pública.
2. Función de cohesión entre los grupos sociales. La divulgación científica y técnica cumple, o debe cumplir, una función de cohesión y de refuerzo de la unidad de los grupos sociales y permite a los individuos participar de alguna manera en las aspiraciones y tareas de una parte de la sociedad que dispone del poder científico y tecnológico.
Como complemento se destaca una función social de la divulgación de la ciencia: conseguir que los científicos y el público se comprendan mejor.
3. Factor de desarrollo cultural. Los primeros que escribieron sobre la necesidad y los problemas de la divulgación de la ciencia, como Pradal (1968) ya advirtieron que divulgar es una necesidad cultural. Hoy creemos de manera casi unánime que la divulgación de la ciencia y la tecnología es necesaria para el desarrollo cultural de un pueblo y que es importante que avances, hallazgos, experimentos, investigaciones y preocupaciones científicas se presenten al público y se constituyan en parte fundamental de su cultura en una sociedad presidida por el ideal científico como es la sociedad contemporánea.
4. Incremento de la calidad de vida. La divulgación de la ciencia no es sólo un factor de crecimiento del propio quehacer científico, sino una aportación al mejoramiento de la calidad de vida y un medio de poner a la disposición de muchos tanto el gozo de conocer como los sistemas de aprovechamiento de los recursos de la naturaleza y mejor utilización de los progresos de ciencia y la tecnología.
5. Política de comunicación científica. En una sociedad cada vez más dependiente del conocimiento tecnológico es extremadamente importante contar con una información honrada, crítica y exhaustiva sobre ciencia y tecnología.Una política científica debe basarse, ante todo, en una política de comunicación científica.
Si se tiene en cuenta que son los políticos quienes deciden sobre el gasto público en I+D y que éste está vinculado directamente a la economía nacional y regional, la información sobre ciencia debería tener mayor relevancia en las sociedades contemporáneas.
6. La comunicación-riesgo. Es aquella que provee información de distintos tipos sobre los riesgos a que estamos expuestos: problemas derivados del medio ambiente y del consumo de drogas o tabaco, seguridad aérea, etc.
7. Función complementaria de la enseñanza. La divulgación científica no sustituye a la educación, pero puede llenar vacíos en la enseñanza moderna, contribuir al desarrollo de la educación permanente y ayudar al público a adoptar una determinada actitud ante la ciencia.
9. Combatir la falta de interés. La gente entiende muy bien aspectos de la política relacionada con la guerra, el orden público, la sanidad o la educación, e incluso ahora el medio ambiente, pero la base de muchas de estas políticas sectoriales es la investigación y el desarrollo, lo que permite la innovación
10. Aprender a comunicar. Después de tener en cuenta estos requisitos, el paso siguiente debería ser el aprendizaje, por parte de los científicos, no sólo a comunicarse entre ellos, lo cual hoy resulta imprescindible, sino a informar a sus conciudadanos sobre los resultados de sus trabajos e incluso sobre el proceso que les lleva en cada caso a un mejor conocimiento del hombre y del universo. Estos diez grandes objetivos de la difusión de la ciencia al público podrían condensarse en dos, visibles y explícitos:
* Uno vinculado al conocimiento: comunicar al público los avances de las grandes ciencias de nuestro tiempo: astronomía, cosmología, origen de la vida, biología, las humanidades, las artes, el conocimiento del universo (micromundo y macromundo) y del propio ser humano. En otras palabras, ayudar a la gente a comprenderse a sí mismos y a comprender su entorno, tanto el visible como el invisible
* Un segundo objetivo de la divulgación científica debería estar centrado en la acción, tras el estudio de las consecuencias del progreso científico. Esta acción exigiría un plan de conjunto de centros de investigación, universidades, museos de la ciencia y, por supuesto, de periodistas, escritores, investigadores, docentes y alumnos universitarios.