4/12/2010

Sábados en la Ciencia 2010
CICLO DE ASTRONOMIA: UN VIAJE A LAS ESTRELLAS


El programa de divulgación científica “Sábados en la Ciencia 2010” celebra 26 años de actividad ininterrumpida, con el ciclo Astronomía: Un viaje a las estrellas que continúa el sábado 24 de abril, a las 12 horas en su espacio tradicional, el auditorio del Museo de Antropología de Xalapa.Sábados en la Ciencia es organizada por la Academia Mexicana de Ciencias A.C., la Universidad Veracruzana, a través de la Secretaria Académica, y el Consejo Veracruzano de Ciencia y Tecnología (COVECYT); el ciclo “Un viaje a las estrellas” está integrado por los siguientes temas: El 24 de abril UNOS CUERPOS MUY DIMINUTOS QUE ENCIERRAN GRANDES SECRETOS Dra. Dolores Maravilla Meza El 29 de mayo LA ESTRUCTURA DEL UNIVERSO Dr. Javier Sánchez Salcedo Y el 19 de junio FORMACIÓN DE ESTRELLAS Y PLANETAS Dr. Salvador Curiel Ramirez, todos investigadores pertenecientes al Instituto de Astronomía de la UNAM y miembros de la Academia Mexica de Ciencias A.C.

La invitación es para todo el público interesado y la entrada es libre.

Sobre astronomía

Estudia los objetos celestes más allá de la Tierra y del Universo en su conjunto, es quizás la más antigua de las ciencias aunque en sus inicios no tuviera ese nombre. El ser humano debió haberse sorprendido e intrigado con el firmamento desde el primer momento de su conciencia, tal vez comenzó hacerse preguntas y buscó respuestas sobre lo que veía en él. La regularidad de su movimiento durante la noche, las formas y acomodo de esas luces. La repetición de los fenómenos celestes fue la base de sus ritos, leyendas y primitivos conocimientos como cuándo sembrar, cuándo cosechar, moverse, guarecerse.

En la antigüedad, astronomía, mitología y magia carecían de fronteras definidas y se confundían, así también una misma persona era el astrónomo, el hechicero y el sacerdote. Durante varios siglos no se llegó más allá de describir las posiciones y el movimiento de los objetos brillantes del cielo nocturno, con una precisión en ocasiones sorprendente.

En los siglos XVII al XVIII, Isaac Newton incorporó a la astronomía rigor matemático y el sustento de un modelo físico a estos movimientos: la gravitación. Sus ideas se desarrollaron consistentemente durante el siglo XIX con Lagrange y Laplace, entre otros.

En los albores del siglo XX la astronomía se nutrió de las dos grandes revoluciones en la física moderna: la comprensión del mundo atómico y el desarrollo de la mecánica cuántica, por un lado, y la formulación de la teoría de la relatividad por otro. Así inició la comprensión de la naturaleza íntima de los objetos celestes. Se pudo entender qué es una estrella, cuál es su temperatura, su composición química, por qué brilla, cómo evoluciona y más.

En el siglo XX también se comprendieron las dimensiones del Universo mediante la determinación de las distancias a otras galaxias. Así se enriqueció la astronomía, mejor entendida como astrofísica y que involucra la Cosmología, ciencia que estudia origen, evolución y destino del Universo como un todo. Los astrónomos son muy atinados detectives, sólo cuentan con la luz como evidencia directa para estudiar el Universo. Todo lo que hoy se sabe de los cuerpos celestes lo deducimos de la luz como única fuente de acceso a sus secretos.

La astronomía no ha perdido su papel fundamental en la búsqueda de respuestas a las preguntas más esenciales del ser humano: ¿hay otras estrellas como nuestro Sol, con otros planetas? ¿Qué futuro le depara a nuestro Sol, al sistema solar? ¿Qué hay entre las estrellas, entre las galaxias? ¿Cómo evoluciona el Universo? ¿Cuál puede ser su destino? ¿Es el nuestro el único Universo? Hoy sabemos que todo el material que nos rodea, del que estamos hechos los seres vivos de la Tierra, el planeta mismo, lo fabrican las estrellas, conocerlas a ellas es conocernos a nosotros mismos.

En México la astronomía fue desarrollada por varias culturas prehispánicas con sorprendente precisión. En el México moderno se hace investigación astronómica en varios centros del país. El más grande de ellos es el Instituto de Astronomía de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), que tiene bajo su responsabilidad el Observatorio Astronómico Nacional (OAN) de San Pedro Mártir (SPM), en el estado de Baja California; y en Tonanzintla, en el estado de Puebla. La sierra de San Pedro Mártir es uno de los dos mejores sitios en el hemisferio Norte (el otro es Hawai) para realizar observaciones astronómicas, debido a sus óptimas condiciones atmosféricas, que además cuenta con la adecuada infraestructura para un observatorio astronómico de competencia internacional.

El Instituto de Astronomía tiene planes de desarrollo para el OAN que lo pueden llevar a convertirse en uno de los observatorios más importantes del mundo.Recuerde la cita es el próximo 24 de abril a las 12 horas en el Museo de Antropología. Mayor información con el coordinador del programa Adalberto Fox Rivera al correo afox@uv.mx o en el teléfono 8421700 ext. 11165.